lunes, 18 de enero de 2016

Conociendo y Reconociendo Huehuetenango

Por Rafael Yon (GT)
“Entro en el nido amante, vuelvo al materno abrigo…”
(Poema a los Cuchumatanes de Dieguez Olaverri)
Con la intención de seguir alimentando la consciencia de mi territorialidad, reconociéndome en su diversidad geográfica y antropológica, decidimos con un grupo de amigos excepcionales organizar un viaje para finales del 2015 a la región noroccidental del país, al departamento de Huehuetenango. Un año antes había podido conocer en un par de oportunidades la alucinante síntesis huehueteca. Esta vez nos disponíamos a reconocer con mayor atención su profundidad, partiendo de sus partes más bajas al oeste del departamento, región fronteriza con México, para luego ir en búsqueda de la mística sierra. Fueron cinco días de intenso y entretenido camino, para resultar en una serie de encuentros con nuestros sentidos físicos y existenciales. Un viaje que grabado en la memoria de cada uno, evocará desde el momento de su irremediable final, las imágenes conmovedoras de un paisaje natural alucinante y una intrigante realidad humana.
Huehuetenango es un departamento ampliamente diverso, en todos los sentidos posibles. Su territorio de 7,400 km2 ha sido testigo de una larga tradición humana, que data desde las primeras poblaciones de cazadores-recolectores del período Paleoindio en Guatemala, hasta la pluralidad actual representada en sus diferentes grupos lingüísticos: los históricos Mames, los Akatekos, los Chuj y los Q’anjob’ales del norte, los Poptíes o Jakaltekos de Jacaltenango, los Awakatekos de Aguacatán, los Chalchitekos de Chalchitán (no reconocidos oficialmente), los Tektitekos de Tectitán y Cuilco, e incluso algunos K’iche’s en el sur de la región.[1] Esta diversidad de poblaciones, con sus propias particularidades culturales y sus evidentes carencias socioeconómicas, convergen en una diversidad de entornos, que van desde los valles kársticos en el noroccidente, hasta los altos paisajes serranos cuchumatenses que coronan el resto de su extensión.
En ruta por la carretera Interamericana, desde el momento en que se entra al departamento, se percibe como la geografía y la configuración social empiezan a variar en relación a la región occidental de Quetzaltenango y Totonicapán de topografía más regular. Estas diferencias comienzan a percibirse, especialmente luego de pasar por su cabecera departamental. Huehuetenango (cabecera), a 215 km de la Ciudad Capital, se presenta como resultado de un desarrollo urbano mal organizado, con una densa concentración demográfica y una alta demanda de servicios, lo que resulta convirtiéndolo n lugar únicamente de paso obligado. A partir de allí, al adentrarse en el departamento en dirección a la frontera noroccidental con México, comienza a observarse durante todo el recorrido como las caudalosas cuencas, que cubren como venas todo el territorio, van formando una topografía única, compuesta por picos caprichosos, quebradas y peñas imponentes, formaciones esculturales en piedra, barrancos sin fin, abismos boscosos, selvas transportadas por ríos azules, lagunas verdes y turquesas, bocas de tierra, ojos de agua, manantiales de luz, corazones de roca viva.
Nuestra primera noche la pasamos en San Ildefonso Ixtahuacán, con la excusa de visitar antiguas amistades. Un lugar ideal para caminar tranquilamente por el parque al finalizar la tarde, cenar en uno de sus tradicionales comedores y por la mañana, mejor si es domingo, sumergirse en la dinámica del mercado local y disfrutar de sus más exóticas mercaderías: pescaditos secos para el desayuno, tamalitos de frijol envueltos en hojas de maxán para acompañar, fresco de carambola para refrescar la caminada, carne de coyote, la favorita de las curanderas para las enfermedades raras y panal de abeja en bolsa para endulzar la partida.
           
Paisajes del noroccidente de Huehuetenango (Nentón)

Al día siguiente, nos encaminamos en dirección a Nentón para encontrarnos con nuestro primer gran destino. A 35 km de la cabecera municipal de Nentón, en dirección a la frontera de Gracias a Dios, en las proximidades de la aldea La Trinidad, a una hora a pie desde la carretera, se abre naturalmente en la tierra un agujero de aproximadamente 175 metros de diámetro y 150 metros de profundidad. Un gran abismo en medio de una llanura kárstica, de forma circular bastante simétrica, con un bosque majestuoso en el fondo y formando todas las paredes, complejos cavernosos que únicamente pueden contemplarse desde sus vertiginosos bordes. Pasar la noche en la orilla de tremenda formación natural fue una experiencia excepcional, presenciamos un atardecer asombroso, para seguir con una noche muy despejada colmada de constelaciones; para encontrarnos finalmente en la madrugada, con una luna que en su zenit, iluminó mágicamente la gran abertura en la tierra, realzando con mayor arrobamiento los sonidos, zumbidos y ecos que, durante toda nuestra estadía, ascendieron desde el interior de ese excelso palacio natural para colmarnos de emoción y de miedo. La visita al Cimarrón, como se conoce localmente, es un paso obligado si se visita Huehuetenango, es una maravilla única, por no decir una importante salida de energía desde el interior de la tierra. Del bosque que invade su fondo se dice mucho en forma de leyenda, pero poco en forma de un verdadero reconocimiento y exploración, sin embargo hay quienes ya registraron sistemáticamente una experiencia de descenso y mucho tienen que decir.[2]
Vistas del Cimarrón en Nentón, Huehuetenango          
Al día siguiente, luego de levantar el campamento, nos dispusimos a caminar de regreso para continuar con el viaje, ahora en búsqueda de los también conocidos: Cenotes de Candelaria. De vuelta hacia Nentón, a 20 km. de terracería sobre el desvío hacia el Río Lagartero, en la comunidad Río Jordán, se encuentra la entrada, no a los “cenotes”, sino como son conocidas por la gente del lugar: las Lagunas de Candelaria. Ya encaminados, desde lo alto, nos sorprendió la primera de las dos, la más pequeña. Desde un pequeño mirador a la orilla del camino, cada uno contuvo el aliento, al observar el fuerte resplandor del sol en la superficie turquesa del agua clara que llenaba el gran ojo de agua, que muy abierto observaba el cielo sin parpadear. El verde de la vegetación que abrazaba la laguna, el calor del medio día y las expectativas, nos motivaron a buscar una vereda para descender a una de sus playas de piedra y sumergirnos en su cuerpo de agua dulce.
          
Río Lagartero
Laguna de Candelaria (peq.)
Allí estuvimos por más de una hora, disfrutando de las corrientes frías y calientes que se mezclan en el fondo del agua, del fresco baño de reflejos que la luz formaba en la arena del fondo y le daban su color a la laguna. Así, revitalizados caminamos dos kilómetros hacia arriba para encontramos con la segunda laguna, mucho más grande que la primera, pero no de color turquesa, sino de un azul hondo, por la profundidad de sus aguas, en las cuales se perdían las piedras blancas que entretenidamente tirábamos para ver cómo se perdían en búsqueda del fondo. Allí pudimos observar como atardecía, como las luces de la tarde llenaban de color los caudales de agua que acompañaban el camino de regreso y los valles verdes, amarillos, ocres y rojos que se extendían frente a nosotros. Ambas lagunas nos dejaron conmovidos, nos sentíamos limpios por fuera y por dentro luego de habernos bañado en singulares pilas celestes, preparados para seguir reconociéndonos en la naturaleza huehueteca, ahora en dirección hacia lo alto de sus montañas.
Laguna de Candelaria (grande)
Luego de un viaje de más de cinco horas, a través de un camino bastante accidentado por la región conocida como Las Huistas, marcada por las presiones y expresiones de la migración al norte, llegamos casi a la media noche a Todos Santos Cuchumatán. Aquí pasaríamos la noche para ir al día siguiente al encuentro de nuestro último destino. El pueblo mam de Todos Santos, ubicado entre las altas mesetas de la sierra de los Cuchumatanes a más de 2500 msnm, es un paso obligado para cualquier visitante en esta región. Un lugar bastante interesante, de gente cálida y puertas de colores, que invitan a recorrer sus calles con el fuerte sol de la tarde y a guardarse en el calor de las casas ante el frío penetrante de la noche. Días antes de año nuevo, nos encontramos con un pueblo en fiesta, en donde el ritmo de una marimba ubicada en el parque central, marcaba el paso de hombres y mujeres, quienes como en pocos lugares en el país, vistiendo sus trajes tradicionales con total autenticidad, se encontraban en las calles y en las plazas. Ancianos, mujeres adultas, niños, niñas, jovencitas con güipiles de colores, jóvenes con parches modernos bordados en sus pantalones rojos tradicionales, todos, mostraban la viva dinámica de un pueblo con una alta estima de su herencia cultural, pero también, con una clara atención a las obligadas transformaciones de nuestra época.
                Vista del pueblo de Todos Santos Cuchumatán                    
Escena cotidiana de Todos Santos
Cerca del lugar, antes de embarcarnos a nuestro último destino, visitamos a media hora de Todos Santos, en dirección hacia la cabecera departamental, el sendero ecológico “La Maceta”. Lugar de recomendada visita, con una variedad vegetal impresionante, y con un río de aguas cristalinas, en el que uno puede sumergir la cara para saciar la sed, sin ninguna culpa o inseguridad. Con un camino a pie de cuarenta minutos desde la carretera hacia la parte alta, se pueden observar una serie de formaciones en piedra, árboles muy antiguos, musgos y flores de diferentes formas y colores, nacimientos de agua a flor de tierra y al llegar al área de campamento; una vista impresionante de los valles, una pequeña laguna, una cascada natural, una serie de cuevas sagradas-ceremoniales y un refugio dentro de los picos rocosos que lo hacen un perfecto sitio para pasar la noche.
Vegetación en sendero “La Maceta” 
Laguna en sendero “La Maceta"            
Finalmente, de Todos Santos salimos en búsqueda de la Laguna Magdalena, nuestra última estación, no sin antes pasar al mirador Dieguez Olaverri, en el cual, en medio de la belleza lírica de los versos que decoran su plaza y el bullicio de quienes llegan más por sí mismos que por la vista, se logra encontrar, dentro de las antiguas casas abandonadas en la alta meseta, el momento preciso para abstraerse y reconocerse en el mar tempestuoso de nubes que decoran el cielo del valle de Chiantla y Huehuetenango. Una parada que definitivamente vale la pena. A diez minutos del mirador en dirección de regreso a Todos Santos, se encuentra el desvío para Laguna. 16 km. son los que nos separaban en ese momento desde la carretera hasta la impresionante reserva natural. En ese momento, ninguno de nosotros dimensionaba lo que estábamos a punto de enfrentar.
En camino hacia la laguna, completamente transportados del paisaje urbano de la carretera hacia Huehuetenango, nos encontramos en un nuevo mundo, nos encontrábamos ante la expresión perfecta de los parajes serranos, ante la idealización de nuestras ideas cuchumatenses. Aquí parecía, a diferencia de las regiones en las que habíamos estado, que la relación entre cultura y entorno natural era mucho más evidente. Niños muy pequeños, con los cachetes curtidos por el frío y por el fuerte sol del mediodía, acompañados de un par de perros, pastoreaban rebaños de ovejas por las verdes praderas del lugar, tupidas de formaciones rocosas y plantas gigantes de agave, algunas florecientes en el ocaso de su vida. Pequeños conjuntos de casas, bastantes separadas unas de otras, todas de gente reservada, algunas de adobe, otras de madera, acompañan el camino hasta la Laguna, leves montañas y amplios valles se extienden igualmente en los derredores, dándole un carácter único al lugar. Luego de una hora y media aproximadamente de camino, nos encontramos con un pequeño conjunto de casas y construcciones, en el que atentamente nos recibieron para parquear nuestro vehículo y orientarnos hacia el interior de la laguna.
Paisajes cuchumatenses en Chiantla, Huehuetenango
Como obra de manos intencionadas, la vereda que conduce a la laguna pasa a través de un jardín natural impresionante, alfombrado todo con diferentes especies de gramas suaves, coronadas por una extensa variedad de flores, arbustos y árboles, igual escenario de niños pastores y rebaños de oveja, chivos y corderos descansando a la orilla del camino. Así durante todo el recorrido, un permanente paso de agua, un río que de vez en cuando encuentra una poza en la cual descansar sus aguas claras, para luego hacerlas continuar en pequeñas cascadas en dirección hacia la laguna. Luego de media hora de un muy entretenido camino, nos encontramos con la entrada a la reserva. La parte final del camino no es menos impresionante y al llegar al destino, es imposible no conmoverse ante el paisaje formado por el paso del agua a través de altas caídas, canales, pilas y depósitos de agua que se forman alrededor de la perla principal, la bella laguna verde-azul, la cual, al borde de las formaciones rocosas que se abren entre los riscos, se convierte en una piscina natural sin fin, de orillas pantanosas y de un fondo verde fluorescente, efecto de las algas que invaden su cuerpo de agua.
Sendero hacia la Laguna Magdalena
Vista de la Laguna Magdalena
El magnífico lugar nos recibió al caer la tarde, pudiendo presenciar como la niebla se apoderaba de todos los rincones del bosque, subiendo poco a poco desde el final de la laguna, hasta el lugar donde habíamos instalado el campamento, a la orilla de una gran cascada. La humedad del lugar y el duro frío de la noche nos obligaron a encender una fogata que nos cobijaría durante todo el rato hasta la madrugada. Las brillantes estrellas y la luna no pudieron dejar de ser protagonistas del espectáculo nocturno y nosotros con dificultad nos fuimos a dormir, para dejar de ser espectadores en primera fila de tales maravillas. El lugar es verdaderamente paradisiaco, por lo que es imposible no recomendar su visita, ya sea para quienes quieran acampar o para quienes quieran dormir en unas cabañas que localmente se han dispuesto para los visitantes menos aventureros. De igual manera, el lugar es para quedarse un buen rato y dejarse penetrar por la expresión particular de su naturaleza.
Laguna Magdalena
Caída de agua
Así, tanto la laguna, como todo el departamento de Huehuetenango, en este caso representando por los lugares descritos, se convierte en una región de destino para todo aquel y aquella que quieran ampliar los horizontes del cuerpo y del espíritu, para todos aquellos a los que les resulte sencillo encontrarse y reconocerse en el reflejo de la naturaleza. Mucho puede decirse de otras experiencias en el mismo departamento, como la Laguna Yolnabaj (Brava) en el norte, el sendero Puerta del Cielo en los Cuchumatanes, el nacimiento del Río Lagartero, el sitio arqueológico mam de Zaculeu en el valle central, entre tantos otros. Huehuetenango es un destino ideal para conocerse y reconocerse, porque sin mayor esfuerzo, uno encuentra el sentido de la vida en el correr permanente de sus claras aguas, en la verde vida de los árboles imponentes que nacen de la profundidad de sus ríos azules, en el frío de sus piedras vivas, en el rojo de la flor del agave, en la fuerza de sus vientos serranos y sobre todo, en el calor de su gente antigua.




[1] Richards, Michael. 2003. Atlas Lingüístico de Guatemala. SEPAZ, UVG, URL, USAID: Guatemala.
[2] Cimarrón en Huehuetenango, descenso, exploración y leyenda. Xplorandoguatemala. 02 de agosto de 2015.  http://xplorandoguatemala.com/montanismo/cimarron-en-huehuetenango-descenso-exploracion-y-leyenda

miércoles, 13 de enero de 2016

Manual para comprender la situación del sistema educativo de El Salvador

Por Carlos Flores Manzano (ES)

“…Hay algo que ha surgido de ustedes que asombra, que trastorna, que reniega de todo lo que ha hecho de nuestra sociedad lo que ella es. Se trata de lo que yo llamaría la expansión del campo de lo posible. No renuncien a eso…”
Jean Paul Sartre

Es enero de 2016, un nuevo año comienza y todo está regresando a “la normalidad” de la cotidianeidad después de las fiestas de fin de año, en este inicio, el más esperado por la población es el del ciclo educativo, ya sea en las escuelas públicas o privadas como en las universidades, y para este año, el Ministerio de Educación (MINED) tiene pactado el inicio de clases en El Salvador para el 18 de Enero.

La situación de la educación en el país es muy interesante, dado que aunque el gobierno central, el ejecutivo, que cambio de visión política desde hace 6 años, solamente se han hecho cambios muy superficiales al grave problema que tiene el país en su sistema educativo. Si bien es cierto, la educación pública ha tenido grandes avances con la entrega de Paquetes Escolares que comprenden: uniformes, zapatos, alimentación gratuita en el país, el gobierno no ha modificado sustancialmente la calidad y la forma de educar a los estudiantes conforme a las necesidades del país, región y la población.

A pesar de los grandes problemas delincuenciales, políticos, económicos, sociales, culturales, identitarios y sobre todo estructurales que tiene el país, el Ministerio de Educación, no ha sido tomado en cuenta como un pilar fundamental para resolver la mayoría de problemas que aquejan a la población, cuando es bien sabido que con una educación de calidad y una buena preparación, muchos de estos problemas pudieran ser diezmados, es más, se han creado nuevos impuestos para seguridad, para equipar a la policía, aumentar la capacidad de respuesta e investigación policial y militar que logren mantener una guerra abierta contra la violencia; la cual, en la situación actual, la urgencia de la seguridad es apremiante pero a la vez es imprescindible que se ataquen las causas estructurales de esta como la exclusión social, fruto de la falta de educación y de oportunidades, esto no quiere decir que no existan grandes avances en la inversión educativa cuando el presupuesto de educación se ha incrementado desde 2008 cuyo monto era 702.5 millones a 940.8 millones para 2016.

Para comprender la situación de la educación en El Salvador hay que remontarnos a la historia de esta, y la función de la educación en el país, ya en 1768, Pedro Cortez y Larraz, obispo de Guatemala, mencionaba que “…en San Salvador no había escuela alguna para enseñar gramática, ni aun para leer ni escribir, ni para enseñar la doctrina cristiana a los niños…”, ya no digamos en el interior del país a la vez es algo esperado dado que la economía de la región posteriormente conocida como El Salvador, estaba limitada al cultivo y exportación del Índigo o Añil, para el cual no era necesario un desarrollo técnico y donde la fuerza bruta era fundamental para mover la economía del país.

A finales del siglo XVIII la educación estaba limitada para ser impartida por la iglesia y esta ordenaba a los padres de los niños indios a financiar escuelas en lengua castellana. Ya para 1808, existían 86 escuelas y 88 profesores para una población de 165,278 personas, una educación impulsada por la necesidad que existía que la población entendiera el idioma de la corona. Cuando se crea la constitución de 1824 de la República Federal de Centroamérica, la educación era “potestad del poder legislativo”, sin haber una institución autónoma que estuviera encargada de esta.

El 8 de octubre de 1832, se tiene el registro del primer instructivo formal de primaria y para el 16 de febrero de 1841 se funda la Universidad de El Salvador. Es importante recalcar que ya habían pasado 300 años desde que se rompió con el sistema educativo formal que se practicaba en Mesoamérica hasta que se creó el primer instructivo formal de educación primaria, en este caso en El Salvador, un lugar de influencia Nahua Pipil y que si bien es cierto existía un crisol de culturas diferentes, esta era la que predominaba, en el Postclásico Tardío en la región de Cuscatan, al oeste del rio Lempa dada la influencia de las migraciones desde el centro de México después del colapso Maya en el Periodo Clásico, de esta educación prehispánica podemos inferir que pudo haber sido similar a la impartida en Tenochtitlan en el centro de México,  es importante saber que los conocimientos “…eran trasmitidos de generación en generación principalmente por los padres, sacerdotes y personas adultas por medio de códices y escritos, es importante señalar que la educación se basaba en principios morales, tradición, religión, guerra y comprensión de la naturaleza…”, esta enseñanza se impartía en lugares especializados en el centro de México, Calmecac para la elite y Telpochcalli para la gente común del pueblo y es muy probable que este tipo de  educación  dado a las similitudes culturales fuera la que se impartía en esta región y a la vez es posible que esta se seguía impartiendo de alguna forma clandestinamente en los años posteriores a la conquista.

En 1841, durante el primer gobierno de El Salvador, bajo la administración de Juan Lindo, se elabora un decreto ejecutivo que crea la educación primaria, media (a través del Colegio la Asunción) y la educación superior ya para 1861, se establece el reglamento de instrucción pública en el cual toda población con una población mayor a 500 habitantes, estaba obligad a tener una escuela esta fue una de las primeras acciones tomadas por el Capitán General Gerardo Barrios al asumir como Presidente de la República luego de ser proclamado por la cámara de diputados y senadores, además este estableció un férreo control gubernamental sobre la universidad salvadoreña, al tiempo que reformó los estatutos y los estudios universitarios. La reforma se extendió al resto de los aspectos educativos de la República, aplicándose a los estudios de primaria, secundaria y profesionales. La reforma educativa tuvo especiales connotaciones en lo referente a la abogacía, donde se trató de evitar las malas prácticas que eran comunes entre los abogados salvadoreños, y a la medicina, donde se quiso aumentar el nivel de los conocimientos médicos y a la vez se estableció un distanciamiento entre el estado y la iglesia católica, lo cual alejo al gobierno salvadoreño de la santa sede, otro dato importantes es que fue Gerardo Barrios el que entre 1890 y 1963 cedió una gran parte de tierras públicas a propietarios privados, siempre y cuando estas se destinaran a la producción de café y modifico la actividad económica al sustituirla de país añilero y algodonero a ser exportador de café.
Luego hubieron una serie de reformas educativas como la de 1894, propuesta por la misión colombiana y Francisco Gamboa, a la vez apoyada por Francisco Gavidia con la clasificación de las escuelas la cual se ve concretada hasta 1903; entre estas reformas una de las más importantes es la de 1940 en la cual durante la administración del General Maximiliano Hernández Martínez se hace un cambio en la currícula escolar así como en las jornalizaciones y en la capacitación docente y rompe con el modelo positivista; ya en 1950 se abre la Escuela Normal “Alberto Masferrer” con la cual inicia la formación profesional de docentes graduados (estas instalaciones serian sustituidas por el Batallón de Reacción Inmediata Atlacatl el 1º de Marzo de 1981 bajo el Comando del Tte. Cnel. DEM. Domingo Monterrosa Barrios).

En la década de los 60´s se realizan varias reformas en el contexto de la guerra fría, para socavar las emergentes ideologías radicales y se inicia la utilización de la televisión (Televisión Cultural Educativa ahora TVE Canal 10) en las aulas en 1968 y a través de esta se instruye a los alumnos mediante programas emitidos desde San Salvador, esto crea oposición entre los maestros tanto en el contenido como en el modo de la reforma y esto genera el surgimiento de  sindicatos de maestros y profesores (ANDES 21 de Junio) que termina en dos huelgas masivas, las cuales fueron reprimidas de forma violenta, lo cual enajena a los maestros y los incentiva a afiliarse a los frentes guerrilleros.
En 1980, en plena guerra civil, se cierra la Escuela Normal de Maestros “Alberto Masferrer”, se cierra la Universidad Nacional y se cierran 877 escuelas, de ahí se mantiene una situación irregular en la educación durante la guerra civil hasta 1991 en el cual surge el programa EDUCO, como estrategia gubernamental para superar la crisis educativa de la guerra civil con la participación de USAID, UNICEF y el Banco Mundial.

El cambio más drástico ocurrió en 1995 con la reforma educativa con la cual se crea la ley general de educación y la ley de la carrera docente, en esta reforma según sus objetivos busca lograr un sistema educativo de calidad, de acceso universal, equitativo y con eficiencia además de ampliar la cobertura educativa, esta reforma tiene dos ejes históricos: una visión operativa y una visión abstracta, al final el objetivo de la reforma es claro: cambiar el rumbo en la forma en la que se educa y ajustar la educación a las necesidades del mercado neoliberal que sale victorioso al final de la guerra fría, esto se ve traducido en que desaparecen las clases de educación artística, desaparece el bachillerato físico matemático, letras, artes, teatro, música y estas se sustituyen por clases de computación, inversión en centros de cómputo y tecnologías, dado que el mercado demandaba mano de obra conocedora de la tecnología y a la vez marca el fin del método lancasteriano o el uso de castigos físicos para corregir a los estudiantes.

En las últimas administraciones se creó el plan 2021 en 2005 entre los cuales sus mayores logros fueron el desarrollo de la educación en el idioma ingles y la construcción de los Megatec y el actual plan educativo que comenzó en 2013, es el Plan Social Educativo Vamos a La Escuela, que su más relevante aporte ha sido la entrega de paquetes escolares.

Ahora que se conoce el proceso por el cual ha atravesado históricamente El Salvador en el desarrollo de su sistema educativo, está de más decir que ningún sistema educativo está al margen de la estructura productiva de un país, específicamente el estado salvadoreño siempre ha organizado históricamente el aparato educativo en función de la estructura económica. Esta situación ya había sido identificada por Jaime Miranda “…partiendo del hecho que la economía salvadoreña se conforma y desarrolla siguiendo la lógica del funcionamiento del mercado capitalista a nivel nacional e internacional, cuyo principal eje es la rentabilidad, La temprana incorporación de la economía salvadoreña a la división internacional del trabajo y su relación con el avance del capitalismo mundial, El Salvador adquirió la categoría de productor de materia prima…” es decir no se necesitaba mucha instrucción formal para cortar café, caña de azúcar, algodón, etc. o la capacitación que requería el momento o principal eje productivo de la economía nacional, a medida que la industria fue creciendo en el mundo y la tecnología se fue desarrollando, la especialización y la repartición de la división internacional del trabajo fue evolucionando y esta necesitaba un nivel educativo más alto para crear mayor rentabilidad, pero a la vez no necesita gente brillante, no necesita iniciativa y pensamiento crítico independiente, solo necesita que la gente haga su trabajo o sea lo suficientemente audaz para poner una empresa que necesite de autómatas o lo que los clientes demanden.

En fin, actualmente en El Salvador, con el abandono de la agricultura y el desarrollo industrial y la deficiente calidad educativa a la vez de las pocas opciones para especializarse (las cuales poco a poco se han ido ampliando), la mayoría de trabajos que existe son "Dead End Jobs", son o empleados/trabajadores/peones, o jefes/capataces/administradores y el gran capital transnacional que dicta que es lo que necesita y que es lo que se pagara bien, depende de las demandas del mercado.

La esperanza radica en que si bien es cierto se necesita de trabajo para lograr un desarrollo económico, también se necesita una educación liberadora que pueda ayudar a desarrollar las mentes humanas, se necesita un desarrollo de la artes, de la historia, de la cultura, de la música, de las letras, de la investigación científica, del deporte no competitivo sino de aquel que mantiene a la población sana y una verdadera apuesta del estado en estos aspectos que apunten a un verdadero desarrollo humano y representen un salto de calidad en el estilo de vida de los salvadoreños, a los cuales quizás sus máximas aspiraciones representan lo que la publicidad –como máximo ente educador de las masas- les invita a que consuman para ser felices.

Referencias

COPADES
2010    El Salvador, Notas sobre el proyecto de presupuesto general del estado para el ejercicio fiscal 2010, GEA, COPADES

Diario Contrapunto
2015    Presentan presupuesto general de la nación 2016

Ferman de Sigüenza, María
2013    Historia de la Educación en El Salvador, Universidad Pedagógica de El Salvador

La Prensa Grafica
2015    MINED, Año Escolar 2016

La Prensa Grafica
2015    MINED presenta logros del periodo escolar 2015 y brinda detalles del próximo año

MCN Biografías
2015    Biografía de Gerardo Barrios

Ministerio de Hacienda de El Salvador
2015    Guía del Presupuesto General del Estado para el Ciudadano

MINED
1995 Reforma Educativa en El Salvador

Miranda, Jaime
1986    Educación e infancia en El Salvador, UCA Editores, El Salvador

Merari Guevara, Luisa
2013    La Educación en Mesoamérica de la Época Prehispánica





martes, 12 de enero de 2016

Verdades que no son… pero incomodan.

Por Wilder Bautista (GT)

Hoy me duermo amargo, agrio de tanta apatía latente a mí alrededor y de la cual también soy parte, cansado de escuchar que la culpa de todos nuestros males está en el gobierno, en el sistema, en los políticos, y obviar de manera tan simple y vaga esa responsabilidad que nos atañe como ciudadanos. Estoy harto de los discursos sindicalistas que claman por  empatía y apoyo mientras son parte y culpables de nuestros grandes males, de esos discursos que dicen pestes del gobierno mientras solapan y son parásitos del mismo, de sus ridículas líneas de negociación en pro del bien común cuando concluyen con la satisfacción de intereses personales.

Debo de sentirme orgulloso del inicio de nuestra segunda primavera, “decían…” en ese tiempo donde salimos a las calles a exclamar y reclamar lo que por derecho “nos correspondía”. Pero, ¿qué nos corresponde y quien es el que lo otorga? La declaración de los derechos humanos establece elementos prioritarios como ideal común entre los que se puede mencionar la salud, ese elemento que me enseñaron a exigir pero nunca a preguntar quién lo daba, y es que, para intereses individuales ¡poco interesa!

Exigimos pero poco damos, aprendemos y enseñamos el derecho pero nos da amnesia de las obligaciones, pedimos a gritos más salud pero son nuestros actos directos e indirectos los que nos enferman. Para empezar, en el imaginario social, ese concepto de salud está tan errado como el trabajo del Parlamento Centroamericano. Estar bien se traduce  en hospitales y tecnología a la vuelta de la esquina, cuando es responsabilidad propia mantenernos sanos. Que las muertes en las regiones pobres son culpa exclusiva de un sistema corrupto y de médicos mediocres que no atendieron a tiempo en los centros de asistencia públicos o por la falta de insumos. Todo lo anterior como verdad absoluta, obvia la responsabilidad social e individual y nos hace víctimas de los gobiernos, las políticas y las leyes pese a que también somos culpables de ellos.

¿Qué pasa si propongo más impuestos, más reglamentos, más sanciones, más responsabilidad individual que estatal, más obligación social y colectiva que gubernamental? Podría parecer que este es uno de los tantos discursos capitalistas, excluyentes, individualistas e incluso neoliberalita, pero quizá tenga un sentido más social y sostenible del que pareciera. 

Sin ánimo de acusar o hacer alarde de sotanas que no me pertenece, quiero hacer alusión a algo tan básico como la atención en salud. Es tan redundante citar lo mal que estamos o los casos de corrupción que existen[1][2][3] que de paso está mencionar, es con lo que hacen dinero los medios periodísticos amarillistas.  Por tanto, tomaré este espacio para mencionar temas poco abordados pero de vital importancia en este sistema sanitario.

Alguna vez leí la expresión: “Nuestro mayor problema no es lo que sabemos, sino lo que damos por cierto, pero que no lo es”. Queda claro que esta frase servirá de base para los siguientes argumentos.  

En años como estos donde mensualmente se padece del desabastecimiento de los hospitales[4][5] salimos con pancartas exigiéndole al estado que cumpla con la gratuidad de los servicios, pero ¿son realmente gratuitos? Llegamos a asumir que el lema de que la educación es laica, gratuita y obligatoria también se aplica para la salud, cuando legalmente no se estipula esto, es más, se determina que el responsable directo de la salud es la persona misma y no el estado[6].

Me pregunto ¿qué tipo de abastecimiento y atención esperamos si las personas del sector económico  informal que pagan solo ciertos impuestos ascienden a más del 70%[7] Pero hasta el 90% de la población usa los servicios? Cabe destacar que este mismo sector es el que más utiliza los servicios sanitarios pese a que aportan menos. ¿Es entonces equitativo y justo? Dirán que es culpa del sistema la falta de oportunidades y que debe equilibrarse brindando estas como medio de compensación. En la última década hemos actuado bajo esta premisa de acercar los servicios sanitarios además de otorgar gratuidad a las poblaciones pobres y desatendidas, el resultado es una masa de personas dependientes del estado, y este último como una figura paternalista que les quita responsabilidades a las personas. Pero es esta misma población la que rechaza las medidas preventivas y exige las curativas pese a que no está dispuesta a aportar dinero. Es decir, no hacen mayores esfuerzos por cuidarse pero en las protestas gritan fervientemente que el gobierno debe pagar por su salud, lo cual se resume en que  alguien más debe pagar por esto. Explicado de otra manera, si dos personas pagan una misma cuota de seguro social y uno de estos individuos bebe, toma y come en exceso, seguramente se usará el dinero de varios para curarlo. Además, ¿qué sucede con las madres que se niegan a recibir cuidados prenatales pero luego exigen una unidad de cuidados intensivos con muchos insumos para atender la complicación producto de su misma negligencia al no querer atención inicial? O ¿qué pasa con las madres que niegan los programas de vacunación preventivos a los recién nacidos pero luego reclaman por la carencia de unidades especializadas para atender neumonías complicadas? O las personas que no usan cinturón o un caso al conducir y que por su propia imprudencia el estado debe gastarse los recursos de otras personas en ellos.  

¿Qué pasaría si se impusieran cuotas tributarias para que el 100% de la población pagara por su salud aunque fuera una cuota mínima? No bastaría mucho para ver como los sindicatos argumentan la privatización de la salud o como la población se niega a pagar el 2% de su ingreso mensual pese a que están dispuestos a pagar hasta el 80% del mismo en centro privados. Y es que, somos felices y estamos tranquilos mientras algo es gratuito, pero la gratuidad es tan solo una mera ilusión porque alguien más paga por ello. No estoy en contra de la atención universal ni el bajo costo de los servicios que los hagan accesibles, pero si estoy en total desacuerdo con esas actitudes y acciones que nos exonere de responsabilidad innata y de las cuales depende la sostenibilidad de un sistema que está colapsado por nuestra propia culpa, ya sea por la omisión de nuestras contribuciones o por la sobrecarga innecesaria que tan solo es producto de nuestras caprichosas e irresponsables decisiones.



[1] "Ministro de Salud habilita número para denuncias de ..." 2015. 4 Jan. 2016 <http://www.prensalibre.com/guatemala/comunitario/ministro-de-salud-habilita-numero-para-denuncias-de-corrupcion>
[2] "Renuncia ministro de Salud de Guatemala en medio de ..." 2015. 4 Jan. 2016 <http://www.laprensagrafica.com/2015/08/24/renuncia-ministro-de-salud-de-guatemala-en-medio-de-crisis-por-corrupcion>
[3] "Ministro señala que hay evidencia de corrupción en ..." 2014. 4 Jan. 2016 <http://lahora.gt/ministro-senala-que-hay-evidencia-de-corrupcion-en-ministerio-de-salud/>
[4] "Persiste caos y desabastecimiento en el Hospital San Juan ..." 2015. 5 Jan. 2016 <http://lahora.gt/persiste-caos-y-desabastecimiento-en-el-hospital-san-juan-de-dios/>
[5] "La crisis hospitalaria se vive sin medicamentos ni insumos ..." 2015. 5 Jan. 2016 <http://lahora.gt/la-crisis-hospitalaria-se-vive-sin-medicamentos-ni-insumos/>
[7] "Guatemala tiene uno de los índices más elevados en ..." 2013. 5 Jan. 2016 <http://www.soy502.com/articulo/guatemala-tiene-una-de-las-tasa-de-informalidad-mas-elevadas>

lunes, 11 de enero de 2016

Volver a descubrir Copán

Por: Ixchel Ayes Rivera

Hace poco menos de un mes tuve la oportunidad (por motivo de ejercicio en una clase) de compartir una breve charla sobre Copán frente a unos compañeros de clase. Cuando inicio una charla sobre Copán (uno de mis sitios favoritos en todo el país) siempre pregunto quiénes de los presentes han tenido la oportunidad de conocer el Parque Arqueológico. En esta ocasión, y para mi grata sorpresa, la mayoría de ellos lo habían visitado alguna vez en su vida, sin embargo a medida que desarrollaba el contenido a presentar, me di cuenta que muchos de ellos poco entendían el valor que encierra el Valle de Copán, con su río Copán a orillas del cual los mayas se desarrollaron como sociedad en el período Clásico de la cronología mesoamericana.

Copán está localizado en el sur-este de la región maya y en el occidente de lo que actualmente es el territorio hondureño. Copán ocupa el primer lugar de los sitios mayas en cuanto a cantidad de esculturas, incluyendo estelas y altares, estando la mayoría de este tipo de tallado sobre las fachadas de templos y edificios. Tiene también el privilegio de poseer el texto escrito más largo del Nuevo Mundo: la famosa Escalinata de los Jeroglíficos de la Estructura 10L-26. (Florescano, 2009)

Escalinata Jeroglífica. Foto: Propia.
Su trazo se orientó de sur a norte. En la parte sur se ubicó el corazón político y religioso de la capital, mediante la superposición y remodelación continuas del palacio original de Yak K´uk Mo´[1] y de los edificios contiguos, hasta formar la llamada acrópolis, el alto recinto reservado a los dirigentes. En esta elevada montaña artificial se agruparon el palacio real, el templo ancestral que guardaba los restos del fundador del reino, los edificios consagrados a los dioses tutelares y los patios destinados a los ritos y ceremonias.

El arqueólogo Sylvanus Morley, en 1920, llamó a estas ruinas la Atenas del Nuevo Mundo reconociendo así su alto valor estético y otorgándole su lugar como uno de los logros culturales más espectaculares del pasado americano y del orbe entero. La UNESCO declaró a Copán como Patrimonio de la Humanidad en 1980 después de que en 1975 comenzara en Copán la arqueología moderna con el Proyecto del Museo Peabody de la Universidad de Harvard. (Fasquelle & Valdés, 1994)

Desde el siglo XIX fueron múltiples expediciones y proyectos arqueológicos las que han contribuido a descifrar el arte, la historia y el legado de Copán para el mundo mesoamericano. Copán encierra muchos tesoros únicos de diferentes escalas.  Ya he mencionado la cantidad de esculturas y la Escalinata de los Jeroglíficos, sin embargo no he destacado aún la calidad de las mismas. La calidad artística y el relieve logrado en las esculturas mayas copanecas es poco usual de encontrar. Algunas obras escultóricas de Palenque pueden compararse (como la crestería de los templos del Conjunto de la Cruz) sin embargo la calidad de los detalles encontrados a lo largo del Sitio Arqueológico de Copán es impresionante y requirió sin duda la mejor mano de obra y el mejor uso de las herramientas con las que contaban, aprovechando además la toba volcánica maleable de la cantera ubicada a un lado del valle.
Escultura en el Museo de las Esculturas de Copán. Foto: Propia.
Por otro lado el Rosalila “es la muestra mejor preservada de arte monumental y de arquitectura encontrada por los túneles de Copán”[2] según el propio Ricardo Agurcia Fasquelle quien fue el arqueólogo hondureño a cargo del túnel que llevó al descubrimiento de dicha obra cuya réplica, desde hace muchos años, es el atractivo principal del Museo de Esculturas de Copán.

Réplica del templo Rosalila en el Museo de las Esculturas. Foto:Propia.
Si bien el Parque Arqueológico de Copán Ruinas es el que cuenta con categoría de Patrimonio de la Humanidad, es importante para acercarnos cada vez más al entendimiento de la cultura maya y la sociedad copaneca, visitar sitios aledaños que además dejan en evidencia que el radio de influencia de dicho sitio era más grande de lo que simplemente podemos percibir desde él.

A 15 minutos (a pie) del Grupo Principal se encuentra el sitio de Las Sepulturas el cual, a pesar de que la entrada al mismo está incluido en el costo del boleto del Grupo Principal, no ha sido promocionado de la misma manera. Las Sepulturas es un barrio residencial de la élite copaneca. Su nombre se debe a los múltiples entierros encontrados en los patios de las residencias, lo cual es evidencia de una costumbre maya de enterrar a sus difuntos en sus mismas casas. En este sitio se encuentran bancas bellamente esculpidas, entre ellas una Banca Celestial cuya réplica se encuentra hoy en día en el sitio original y la obra original resguardada en el Museo de Esculturas. En la Banca Celestial se encuentran representados el sol poniente, el sol naciente, la luna y venus, todos ellos con un importante valor simbólico en la cosmovisión maya.

Toma de una porción de la Banca Celestial. Foto: Propia.
Aproximadamente a dos kilómetros de Copán Ruinas (y pasando la entrada del Hotel Clarion de Copán) se encuentra El Rastrojón. Además de llamar la atención por estar ubicado en una colina y ofrecer una vista impresionante del Valle de Copán y las estelas colocadas a lo largo del mismo, la Estructura 3, apodado como “el Titánico” deja en evidencia “los efectos del tiempo y las consecuencias de construir sobre cavidades de piedra caliza”[3] pues sus restos se ven esparcidos a lo largo de una falla geológica en la que se edificó en tiempos del 12° gobernante de Copán.

Estructura 3 en El Rastrojón. Foto: Propia.
En el municipio de Santa Rita, a 18 kilómetros del Parque Arqueológico Copán se encuentra Río Amarillo. Este sitio arqueológico está conformada por 53 estructuras. Se cree que este sitio fue previo a la dinastía copaneca fundada por Yak K´uk Mo´ y destaca en él una piedra rojiza diferente a la piedra caliza predominante en los sitios anteriores.[4]

Sitio Arqueológico Río Amarillo. Foto: Propia.
Por último pero no menos importante deseo dejarles el interés por conocer El Puente, un sitio arqueológico ubicado en el municipio de La Jigua y con un desvío de 15 minutos en carro desde la carretera que conduce desde La Entrada hacia Copán Ruinas. Los trabajos arqueológicos realizados en este sitio e inclusive el mantenimiento hasta el día de hoy, han sido auspiciados por el gobierno japonés. Ha estado abierto al público desde 1994 y tiene una superficie de 2 km2 y cuenta con un pequeño museo con historia cultural de la zona, explicación de los trabajos de excavación y una maqueta del sitio pero lastimosamente recibe una pequeña cantidad de visitantes y no cuenta con una fuerte promoción.[5]
Sitio Arqueológico El Puente. Foto: Propia.
Para todos mis compañeros(as) y para muchos lectores queda mucho por descubrir. Espero con esta pequeña entrada contribuir a despertar el interés por estos tesoros que se encuentran un poco opacados por la fama del Parque Arqueológico de Copán Ruinas el cual, de igual forma,  merece un reconocimiento más profundo de sus valores. ¡Están invitados!




[1] Fundador de la dinastía de Copán. Su nombre significa Quetzál-Guacamayo y se cree que es originario del área del Petén en Guatemala.
[2] Así lo describe en su libro “Los secretos de Rosalila” de 2014.
[3] Extraído de la placa de información al pie de la Estructura 3 en el sitio.
[4] http://www.ihah.hn/MuseosParques/MuseosParques
[5] http://asociacioncopan.org/el-puente/

Bibliografía Consultada:

- Agurcia Fasquelle, R. (2014). Los Secretos de Rosalila. Tegucigalpa: Transamérica.
- Fasquelle, R. A., & Valdés, J. A. (1994). Secretos de dos ciudades mayas: Copán y Tikal. San José, Costa Rica: La Nación.
- Florescano, E. (2009). Los orígenes del poder en Mesoamérica. México: Fondo de Cultura Económica.